Creemos en la importancia de desarrollar el discipulado en la Iglesia (Mateo 28:19-20; 2Timoteo 2:2), así como una responsabilidad mutua de todos los creyentes de unos a otros (Mateo 18:5-14)
Creemos en la necesidad de ejercer la disciplina de los miembros de la congregación que están en pecado de acuerdo a las normas de la Sagrada Escritura (Mateo 18:15-22; 1 Corintios 5:1-13; 2 Tesalonicenses 3:6-15; 1 Timoteo 1:19-20; Tito 1:10-16).